El regreso de la Diosa
Desde hace ya algún tiempo son más las personas que se han
reencontrado con la energía de la Diosa.
Es sabido que el culto de la Diosa viene de tiempos muy antiguos, le
llamaban la vieja religión. Ahora en el
camino del despertar de la energía femenina tanto en hombres como en mujeres se
va recobrando el conocimiento de las prácticas ancestrales y de comunión con la
Diosa.
En la actualidad en la mayoría de los caminos de sacerdocio
ya no se toma como una religión, sino
más bien como un camino libre, de crecimiento, de empoderamiento, de mucho
amor, aunque sí, de compromiso.
Las personas que han hecho este camino reconocen una gran
alegría al despertar esta energía olvidada, reconectan con el gozo, la alegría,
la conexión con la naturaleza y sus ciclos.
El camino de las sacerdotisas y sacerdotes en conexión con
la Diosa es un camino de empoderamiento, auto maestría, conexión y amor.
(Ver llegar a ser
Sacerdotisa y Sacerdote de la Diosa)
La Madre se ha manifestado de múltiples maneras a través del
tiempo en diversas culturas. La hemos percibido en la Madre María como un gran
contenedor de su energía; en Kuan Yin en la cultura china, madre de compasión y
amor; en Isis la gran Diosa de las artes sanadoras en Egipto, como Shakti en la
cultura hindú o como Tara la Diosa de protección; en Buffalo Calf Woman para
los lakotas; otras veces nombrada como Shekinah para los cabalístas; Gaia como
nuestra madre Tierra; en la religión católica como el Espíritu Santo y de
muchas maneras más.
“Yo soy la Madre cósmica representada en ISIS. El aspecto
femenino del universo. La Madre siempre les acompaña en todo momento y a través de todos los tiempos,
soy la energía divina femenina en todo ser. Estoy en todos y en todo, así como
el Padre también lo está.
Hablarle a Isis es hablar a la energía de la Madre, hablar a
Kuan Yin o a Gaia también lo es. Puedes llamarme en todos los aspectos.”
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